Empezó Jon a contarnos que con 8 años le diagnosticaron una enfermedad visual muy poco común. La realidad es que empezó a no distinguir las matriculas de los coches y acabó dándose cuenta de que todo eran como "manchas". Ásí que sus padres decidieron no rendirse y decidieron que tenían que vivir con ello y seguir. Se compraron una autocaravana y empezaron a hacer excursiones y a irse al campo los fines de semana. En una ocasión, decidieron probar con el esqui...y les gustó.....MUCHO.
Así que decidieron buscar un guía para Jon y fueron probando...y probando...hasta que un día Jon y Miguel se conocieron. Miguel era nacido en Candanchú (como nuestra querida Susana) y había estado en el equipo nacional de esquí pero quería dejar ya la competición por un tiempo. Así que, la propuesta de Jon de si quería ser su guía le apeteció y aceptó el reto.
Las medallas, los campeonatos, las alegrías e incluso los llantos llegaron mucho después. Tras mucho esfuerzo, disciplina, entereza y tesón.
La verdad que nos parecieron un par de chavales admirables que miran a la vida de cara y sin miedo. Unos luchadores. Con sentido del humor....y encima ....¡guapos! sino que se lo digan a las alumnas de 6º que se quedaron encantadas con ellos.
Les prometimos que veríamos este año las olimpiadas paraolímpicas tras las olimpiadas de Londres.
Si queréis seguirles podéis hacerlo a través de www.esquia2.com. o en facebook en esquia2.
Yo ya me he hecho fan.
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